Este sábado Coros y Danzas de Ingenio disfrutó de su ya tradicional almuerzo de Navidad durante el cual la buena comida, la camaradería, la alegría y el buen ambiente entre grandes y pequeños garantizaron el disfrute de los numerosos participantes.
Pintacaras, un castillo hinchable, el “amigo invisible”, los acordes de la Banda Isleña, que levantó a todos de sus asientos para bailar, la música del DJ Paco Sánchez y la restauración de Carben, garantizaron la diversión de esta fiesta que se completó endulzada con una gran tarta simbólica y personalizada para la ocasión”.